Una reunión de las nuevas autoridades de la Agencia Nacional de Laboratorios Públicos (Anlap) con los directivos del Laboratorio Industrial Farmacéutico (LIF) de la provincia de Santa Fe oficializó la decisión del Ejecutivo de “no dar continuidad” al programa CUS Medicamentos, reemplazante de plan nacional Remediar. Si bien en la cartera de Jorge Lemus plantean que sólo hay un cambio de denominación, la información que llegó a los laboratorios indica un cese de la provisión centralizada desde Nación y una derivación del tema a las provincias. El plan Remediar, que deja formalmente de existir, garantizaba el acceso a medicamentos a un menor costo y en los puntos más remotos del país, además de fomentar la producción nacional.
La información comenzó a circular tras la reunión que el lunes mantuvieron las autoridades de Anlap con las del Laboratorio Industrial Farmacéutico (LIF), de Santa Fe, uno de los tres principales productores públicos de medicamentos del país junto con Laboratorio de Especialidades Médicas (LEM), de Rosario, que también estaba en el encuentro. Allí el nuevo presidente de la Anlap, Alfonso Sánchez de León, transmitió la decisión a los directores del LIF, Diego Bruno y Jorge Stettler, según informó la prensa provincial.
El titular de la agencia nacional les comunicó a las autoridades del LIF que “en este año finalizaría la provisión centralizada de medicamentos desde el Ministerio de Salud de la Nación, a través de la Cobertura Universal de Medicamentos (CUS, ex programa Remediar), derivándose la misma a la gestión individual, en cada provincia”.
“La incertidumbre pasa por el hecho de que veníamos trabajando en forma mancomunada con el gobierno nacional, con una provisión de medicamentos ya establecida para ese programa y ahora hay que pasar a un trabajo más en terreno, recorrer el país, para alcanzar acuerdos con las provincias y municipios”, dijo Guillermo Cleti, miembro del directorio del LIF, a El Litoral.
La explicación oficial señala que Remediar era producto de un financiamiento internacional que se terminó -del Banco Interamericano de Desarrollo (BID)- pero que el programa continúa sin más modificación que la denominación. A los laboratorios de producción pública, sin embargo, ya comenzaron a oficializarles los cambios desde la Anlap. “Los laboratorios trabajan a seis meses o un año de planificación, entonces necesitan tener ya el contrato firmado para poder seguir trabajando. Están muy preocupados por la falta de contrataciones y les tuvieron que blanquear que era porque no iba a haber más” contratos desde el Estado nacional, explicó un especialista en políticas sanitarias.
“Considero que el plan ha sido un éxito desde su inicio, para mí no está muy bueno que haya pasado esto. En principio la provincia de Santa Fe va a estar abastecida, porque esos medicamentos se producen en el laboratorio”, dijo Bruno, uno de los directivos de LIF. Pero advirtió –en declaraciones a Sin Mordaza- que la confirmación del fin del rebautizado plan Remediar genera "un escenario de mucha incertidumbre" y que puede "ser un problema para otras provincias del país".
“No solamente el programa Remediar fue un éxito en reducir costos de los medicamentos por lo menos siete veces y en garantizar la llegada federal a todos los rincones del país. Además, como política sanitaria, orientaba las consultas al primer nivel de atención: como en los domicilios se podían resolver los problemas porque había medicamentos, bajaba la demanda de las guardias de los hospitales”, explicó el ex viceministro de Salud Nicolás Kreplak y referente de la Fundación Soberanía Sanitaria, en diálogo con Política Argentina. Y agregó: “Cuando baja la demanda de la guardia y empieza a haber un médico generalista que conoce a la familia y al barrio, el abordaje de la problemática de salud es integral y mil veces mejor. Cuando ellos –la gestión actual- dicen ‘lo vamos a transformar y ahora van a ir a buscar los medicamentos a la farmacia’, no sólo no conocen el país sino que además se pierde la estrategia de prevención y promoción de la salud”.
“La incertidumbre pasa por el hecho de que veníamos trabajando en forma mancomunada con el gobierno nacional, con una provisión de medicamentos ya establecida para ese programa y ahora hay que pasar a un trabajo más en terreno, recorrer el país, para alcanzar acuerdos con las provincias y municipios”, dijo Guillermo Cleti, miembro del directorio del LIF, a El Litoral.
La explicación oficial señala que Remediar era producto de un financiamiento internacional que se terminó -del Banco Interamericano de Desarrollo (BID)- pero que el programa continúa sin más modificación que la denominación. A los laboratorios de producción pública, sin embargo, ya comenzaron a oficializarles los cambios desde la Anlap. “Los laboratorios trabajan a seis meses o un año de planificación, entonces necesitan tener ya el contrato firmado para poder seguir trabajando. Están muy preocupados por la falta de contrataciones y les tuvieron que blanquear que era porque no iba a haber más” contratos desde el Estado nacional, explicó un especialista en políticas sanitarias.
“Considero que el plan ha sido un éxito desde su inicio, para mí no está muy bueno que haya pasado esto. En principio la provincia de Santa Fe va a estar abastecida, porque esos medicamentos se producen en el laboratorio”, dijo Bruno, uno de los directivos de LIF. Pero advirtió –en declaraciones a Sin Mordaza- que la confirmación del fin del rebautizado plan Remediar genera "un escenario de mucha incertidumbre" y que puede "ser un problema para otras provincias del país".
“No solamente el programa Remediar fue un éxito en reducir costos de los medicamentos por lo menos siete veces y en garantizar la llegada federal a todos los rincones del país. Además, como política sanitaria, orientaba las consultas al primer nivel de atención: como en los domicilios se podían resolver los problemas porque había medicamentos, bajaba la demanda de las guardias de los hospitales”, explicó el ex viceministro de Salud Nicolás Kreplak y referente de la Fundación Soberanía Sanitaria, en diálogo con Política Argentina. Y agregó: “Cuando baja la demanda de la guardia y empieza a haber un médico generalista que conoce a la familia y al barrio, el abordaje de la problemática de salud es integral y mil veces mejor. Cuando ellos –la gestión actual- dicen ‘lo vamos a transformar y ahora van a ir a buscar los medicamentos a la farmacia’, no sólo no conocen el país sino que además se pierde la estrategia de prevención y promoción de la salud”.